Precisamente, gran parte de nuestra vegetación está adaptada a la acción del fuego, con estrategias rebrotadoras o de germinación tras el incendio.
Las especies que germinan con profusión tras el fuego basan su estrategia en la posesión de semillas que se mantienen protegidas en el suelo y viables durante años (caso del romero, la aulaga morisca y las jaras), o en la posesión de órganos que actúan como estuches protectores de semillas que la planta mantiene viables en cualquier época del año (las piñas maduras, pero cerradas, típicas del pino carrasco).
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Localización de los incendios detectados por MODIS a bordo de los satélites Terra y Aqua durante un período de 10 años. Cada punto de color indica un lugar en el que MODIS detectó al menos un incendio durante el período de composición. Gamas de color rojo a amarillo en el que el número de incendios es grande.
¡¡Peligro de incendio!! … Vamos a sensibilizarnos para evitar el fuego